martes, 25 de septiembre de 2007

Una Taza De Café..!



Recuerdo de mi infancia que al regreso de mi abuela de la consulta médica, lo único que resaltaba era que nuevamente le habían prohibido el café, eso me enojaba en contra de su doctor porque sabía lo tanto que la abuela amaba el café.
Pero era una rutina usual a las consultas, suspender la ingesta de café, a veces sin una razón influyente en la salud del paciente.

Pero, ¿es malo el café?
Bien, no podemos encasillar esta cálida bebida de pozuelos, ya que si bien tiene efectos sobre la salud, predominan los positivos.
En el caso de las embarazadas se ha demostrado que el café traspasa la barrera placentaria y puede entrar en contacto con el feto, pero con el uso controlado (no mas de una taza por día, de forma no rutinaria) no producirá alteración en el feto.
La cafeína, que es la sustancia activa del mismo, tiene repercusión sobre el sistema cardio-vascular aumentando el bombeo cardiaco (efecto mínimo por corto tiempo) y produciendo vasoconstricción (favorece contra los dolores de cabeza).
También en pocas cantidades tiene un efecto diurético y no está contraindicado en hipertensión.
La cafeína pertenece al grupo de las xantinas, sustancia estimulante del sistema nervioso central, la cual está presente en el chocolate, algunas bebidas gaseosas y en fármacos contra la migraña.
El café, no causa una adicción o dependencia directa, pero a los usuarios asiduos de esta bebida les es difícil dejarla de forma brusca por la costumbre, más que por una dependencia orgánica (una parada brusca puede producir dolor de cabeza, el cual es un efecto pasajero)