Lo cierto es que para los podologos y dermatólogos esto se define como nevos ungueales, en un termino mas peculiar serian LUNARES, los cuales pueden ser congénitos o adquiridos, se presentan como manchas, algunas no muy prolongadas.
Estas manifestaciones suelen ser benignas, pueden surgir y desaparecer sin causar el menor daño, se presentan hacia la base y van avanzando de acuerdo al crecimiento de la uña.
En ciertos casos son fortuitos, pero pudieran estar relacionados a un mal patrón alimenticio, como también a traumas recientes en el platón ungueal.
Son frecuentes en los niños y adolescentes, y con menos frecuencia en los adultos, pero si estas se hacen persistentes, es necesario visitar al facultativo.